En Carema nunca hemos aplicado restricciones físicas ni sujeciones, pero ya contamos con un certificado emitido por CEOMA (Confederación Española de Organizaciones de Mayores) que así lo corrobora.
“Desatar al Anciano y al Enfermo de Alzheimer” es una iniciativa aglutinante de voluntades y hechos encaminados a conseguir que las personas mayores y Enfermos de Alzheimer vivan libres de restricciones de cualquier tipo y en cualquier lugar o momento.
¿Qué son los centros libres de sujeciones?
Un centro libre de sujeciones es aquel donde no se utiliza ningún tipo de sujeción física, entendiendo esta como la limitación de la libertad de movimiento de una persona o de su actividad física o del normal acceso a cualquier parte de su cuerpo, a través de un método físico externo aplicado sobre ella o adyacente a ella, del que no puede liberarse con facilidad.
La eliminación del uso de sujeciones en el cuidado del mayor, tiene como objetivo favorecer la dignidad y la libertad de la persona, ya que las consecuencias de las sujeciones implican:
- Pérdidas en la función cognitiva
- Pérdidas en el funcionamiento físico
- Pérdida de la continencia
- Pérdida de la integridad de la piel
- Pérdida de apetito o riesgo de desnutrición
- Muerte súbita o por estrangulación
- Sufrimiento psicológico de la persona afectada
Beneficios de las residencias libres de sujeciones
La eliminación de las sujeciones tiene efectos muy positivos para los residentes y se enmarca en la perspectiva del Modelo de Atención Centrado en la Persona, siendo las principales ventajas las siguientes:
- Disminución de las alteraciones de conducta del mayor. Sin sujeciones, la persona se siente menos amenazada y tiende a comportarse de forma menos agresiva.
- Limitación de diferentes sentimientos negativos como la tristeza o el aturdimiento, al no existir una privación de sus libertades.
- Menor probabilidad de caídas de gravedad en ancianos.
- Menor riesgo de sufrir escaras, que son úlceras que aparecen en la piel o en el tejido interno cuando la persona mayor pasa mucho tiempo sin cambiar de postura, debido al propio peso del cuerpo que arrastra los vasos sanguíneos.
- Menor pérdida de masa muscular y menor prevalencia de enfermedades como la sarcopenia, que provoca la pérdida de fuerza en quien la padece y, por ende, un aumento de su grado de dependencia.
Aunque cada persona tiene sus propias características, en general, las mejoras en su salud y en el plano físico al eliminar las sujeciones son notables, traduciéndose en un menor número de caídas, disminución de úlceras y contracturas, menores niveles de atrofia y debilidad y un menor riesgo de traumatismos en la piel, sin olvidar el plano emocional con una disminución de la agitación, la ansiedad, la apatía, la confusión o la ira.